La heroína es una droga ilegal altamente adictiva con graves consecuencias para la salud. Si bien la sobredosis y las enfermedades infecciosas son riesgos bien conocidos, el daño físico directo causado por el consumo de heroína puede extenderse más allá del torrente sanguíneo. Un estudio reciente analizó un efecto secundario preocupante: la necrosis por inhalación nasal de heroína.
Cocaína vs heroína: efectos similares, daños diferentes
Inhalar cocaína por la nariz se ha relacionado durante mucho tiempo con la necrosis nasal y del paladar blando, una afección grave que provoca la muerte del tejido. Esta necrosis se debe a los efectos vasoconstrictores de la cocaína, que limitan el flujo sanguíneo y causan la muerte del tejido nasal sensible.
Sin embargo, se sabe menos acerca de los efectos similares causados por la heroína inhalada. El estudio mencionado analizó retrospectivamente 24 casos de lesiones orofaciales en pacientes que consumían heroína por vía nasal entre 2006 y 2012.
Los casos analizados: consumidores crónicos con lesiones graves
El estudio se centró en 17 hombres y 7 mujeres con una edad promedio de 29.5 años. Todos eran consumidores crónicos de heroína inhalada, con un consumo que variaba entre 2 meses y más de 10 años. Seis pacientes también tenían antecedentes de abuso de cocaína. La cantidad promedio de heroína consumida diariamente era de 5 gramos, con un rango que iba de 0.5 a 10 gramos.
Las lesiones encontradas en estos pacientes fueron variadas e incluyeron:
- Perforación nasal (11 casos)
- Úlceras o enrojecimiento nasal (5 casos)
- Necrosis del septum nasal (tabique nasal) (5 casos)
- Úlceras faríngeas (garganta) (3 casos)
- Daños en el paladar blando (5 casos)
Los síntomas clínicos más comunes fueron dolor nasal, secreción nasal purulenta (pus), dificultad para tragar y rinitis (inflamación de la mucosa nasal).
Tratamiento y consideraciones clave
Tras el diagnóstico, se inició un tratamiento de mantenimiento con metadona (19 casos) o buprenorfina (3 casos), medicamentos utilizados para tratar la adicción a los opioides. En 8 casos, las lesiones mostraron signos de mejora.
El estudio resalta la importancia de considerar la heroína como una droga que puede causar lesiones orofaciales graves por inhalación nasal. Ante la presencia de daños nasales en personas con antecedentes de abuso de drogas, se debe sospechar no solo de cocaína, sino también de heroína.
Un enfoque multidisciplinario para una problemática compleja
El tratamiento de la necrosis causada por la heroína inhalada requiere un enfoque multidisciplinario. Esto puede incluir:
- Tratamiento de la adicción: El tratamiento ultrarápido de TAVAD puede acabar con la adicción y prevenir el uso continuado de heroína, evitando así un mayor daño tisular.
- Limpieza y desbridamiento de heridas: La eliminación del tejido muerto puede ayudar a prevenir infecciones y facilitar la cicatrización.
- Cirugía reconstructiva: En casos graves, puede ser necesaria una cirugía reconstructiva para corregir las lesiones y mejorar la función nasal o palatina.
Conclusión
La heroína inhalada es una práctica peligrosa que no solo conlleva el riesgo de adicción y sobredosis, sino que también puede causar daños físicos graves en la nariz, la garganta y el paladar blando. Si tú o un ser querido lucha contra la adicción a la heroína, buscar ayuda profesional es fundamental. El tratamiento integral puede abordar tanto la adicción como las complicaciones físicas asociadas.