Definición del PCP
Polvo de ángel, Ozono, Combustible de cohete, Zombi, Píldora de la paz,… son otras nomenclaturas callejeras que refieren a la Fenciclidina (PCP), droga ilegal que comenzó a desarrollarse en los años 50 del siglo XX como anestésico general.
El PCP se clasifica dentro del grupo de los «anestésicos disociativos», debido a que el consumidor se encuentra «desconectado» de su entorno: sabe dónde está, pero no siente que forme parte de ese sitio.
Efectos del PCP
La acción de la droga varía según la persona. Su efecto puede ser estimulante, depresor, analgésico (calmando el dolor) o alucinógeno, dependiendo tanto de la dosis como de la vía de administración.
El PCP se puede tragar, esnifar, inyectar o fumar. Dependiendo de la forma en la que se tome la droga, los efectos se hacen notar en pocos minutos o al cabo de una hora. El PCP puede persistir en el organismo mucho tiempo: su vida media en el cuerpo humano abarca de 11 a 51 horas.
Es posible desarrollar tolerancia y dependencia al PCP. El síndrome de abstinencia contempla diarreas, escalofríos, temblores.
Dosis bajas
Euforia (bienestar), relajación, entumecimiento, distorsión sensorial, sensación de separarse del propio cuerpo, ansiedad, confusión, amnesia, discurso irracional, visión borrosa, mirada en blanco.
Dosis medias
Confusión, agitación, analgesia, fiebre, salivación excesiva, comportamiento de tipo esquizofrénico.
Dosis altas
Calambres, fiebre, fallo respiratorio, infarto, coma, incluso la muerte.
El cerebro
El PCP infiere en múltiples sistemas de neurotransmisión. De ejemplo, el PCP inhibe la recaptación de dopamina, norepinefrina y serotonina, y de glucamato mediante el bloqueo de los receptores NMDA. Además, algunos tipos de receptores opiáceos del cerebro también son afectados.
Importante: Cantidad desconocida… efecto inesperado
El uso anestésico del PCP se detuvo cuando se manifestaron brotes psicóticos por parte de los pacientes, y la droga se ilegalizó. Ahora el PCP se ha abierto camino en las calles, a menudo como añadido sobre otras drogas sintéticas. A menudo se vende en lugar del LSD y la mescalina, aunque lo cierto es que los efectos del PCP son diferentes: además de actuar como un alucinógeno, también desgasta la constitución física.
En cualquier caso los efectos dependen de la cantidad administrada. Si a esto ha de sumarse la condición ilegal de la droga, el PCP está fuera de control; hasta tal punto que la persona que lo consume no sabe nunca en qué cantidad lo está haciendo realmente. Todo lo cual ha hecho del PCP una droga especialmente peligrosa.
Más información sobre qué es el PCP (University of Washington)