Cómo traté mi adiccion a la cocaina

 “Lo que más valoro es el acompañamiento personal que he tenido desde el primer día. No te sientes juzgado y sí entendido.”

Su batalla personal contra las drogas se convirtió en su mayor victoria. Hoy hace un año que Victoria ingresó para tratar su adiccion a la cocaina. Ella misma nos lo cuenta:

Ha pasado casi un año desde entonces, estás a punto de finalizar el tratamiento. ¿Cómo estás hoy? ¿Cómo es tu vida ahora?

No me siento acelerada, estoy ilusionada, el levantarme de la cama, la capacidad de gestionar las cosas y, sobre todo, la normalidad. Disfrutar del momento relajada es un placer. Antes lloraba mucho, estaba atacada todo el día. Soy menos estridente, más mesurada, tengo autocontrol. Me han cambiado hasta las facciones de la cara; estaba desencajada. Volver a oler, a respirar… antes estaba constantemente moqueando y tocándome la nariz.

He recuperado horarios y soy más productiva en mi trabajo. Tengo más visión ante las situaciones a las que tienes que enfrentarte todos los días en el trabajo y más aún dirigiendo una empresa. Antes no llegaba a nada, ahora cumplo.

Ha vuelto Victoria. He notado mucho cambio en las relaciones, hoy sé gestionar los conflictos con inteligencia emocional, ya no entro al trapo.

Cuéntanos cómo ha sido el tratamiento. ¿Qué es lo que más valoras de Tavad?

El tratamiento me ha hecho más fuerte, toqué fondo y he resurgido. La cocaína ha estado muy presente en mi vida, más de 10 años de consumo. No pensaba que pudiera salir de ahí, creo que por eso he tardado tanto tiempo en tratarme. Hoy estoy muy orgullosa de haberlo hecho, siempre puedes reconducir tu vida.

Lo que más valoro es el acompañamiento personal que he tenido desde el primer día. No te sientes juzgado y sí entendido. Además, te explican de forma retrospectiva qué te ha llevado a esa situación para comenzar a trabajar desde ahí. Mi punto de inflexión fue la muerte de mi hermano… Al principio solo lo hacía los fines de semana y al final, era trabajar para poder consumir y mi cuerpo aguantaba. El desfase y deterioro era evidente, pero yo no me daba cuenta.

Antes era como el conejo de Alicia, corriendo y como loca descontrolada a todas partes. Todo eran dramas y conflictos Clic para tuitear

¿Esperabas que el tratamiento fuera así?

Tenía dudas, no tenía claro que fuera a ser suficiente un ingreso de 3 días para superar mi adiccion a la cocaina en la que consumía hasta 5 gramos diarios y 15 cervezas. Pero el tratamiento ha superado mis expectativas en un 500%. No esperaba ni una cuarta parte de lo que me ha dado y de lo que me habéis dado todos vosotros.

El Hospital además es privado, nadie sabe a lo que vas ni por qué estás allí. Puedes salir a fumar, a pasear por el jardín… Los médicos y psicólogos vienen a la habitación para ver cómo te vas encontrando y para empezar con las sesiones de terapia pero no te sientes encerrada.  Desde el ingreso creas un vínculo con el equipo maravilloso, y hasta hoy.

Una de las cosas más importantes además del ingreso hospitalario ha sido mi terapeuta. Me vienen muy bien las sesiones, me hacen más fuerte.

Y con el programa de nutrición estoy encantada, poco a poco he ido cambiando hábitos y gracias al mindfulness del Centro, he aprendido a hacer ejercicios de relajación para sentir la respiración y frenar la ansiedad. Ahora pienso en el futuro, he recuperado las fuerzas y la ilusión. Estoy aprendiendo a gestionar los problemas y a aguantar el estrés.

Antes era como el conejo de Alicia, corriendo y como loca descontrolada a todas partes. Ahora soy organizada, no hay caos. Hace unos meses todo era un drama. El tratamiento ha dado orden y alegría a mi vida.

Tuve un año con muchos problemas, estaba amarilla, tenía sarpullidos por todo el cuerpo, taquicardias… Forcé la máquina y me asusté.

No recuerdo los últimos 5 años de mi vida, ¿te lo puedes creer? En estos últimos meses tengo millones de recuerdos más que en los últimos 5 años. Mi principal objetivo desde el comienzo del tratamiento ha sido volver a la normalidad. Pensaba que mi enfermedad, mi adiccion a la cocaina, no tenía solución.

¿Qué es lo que más destacarías de tu paso por nuestro centro de desintoxicación?

Los médicos han sido mis salvadores, soy muy incrédula y no las tenía todas conmigo. Si hubiera esperado más tiempo a hacerlo, al ritmo que iba, igual no lo cuento. La medicación que tomaba los primeros meses de tratamiento además de no generarme ninguna adicción, no me ha impedido seguir con mi vida. Al Dr. Legarda tendrían que darle el Premio Nobel de la Química.

La calidad humana de TAVAD es increíble, la confidencialidad y normalidad con la que tratáis el tema. El precio está más que justificado. No lo veo caro si lo comparo con lo que me gastaba en droga que eran unos 200€ al día. ¿Qué es caro para ti? Depende de qué, ¿no? Es como un viaje. Y este tratamiento no puede ser más completo: gastos médicos, 1 año de terapia, 5 profesionales a tu disposición trabajando en tu recuperación, atención personalizada… No me puedo creer que además, valga lo que vale.

Sin autodestruirme, he aprendido a quererme y a llevar una rutina diaria. He maltratado tanto a mi cuerpo, pero nunca es tarde, lamento no haberlo hecho antes. Me habéis cambiado la vida. ¡Bueno, me la habéis devuelto!

¿Qué le dirías a alguien que necesita ayuda?

Que lo va a agradecer, que no lo piense. Yo en salud lo he ganado todo. Orden y cero disgustos. El poder mirar a la gente sin estar tocándome la nariz… Cada día que pasa sin tratarte estás perdiendo tiempo y dinero.

Si estás leyendo esto es porque necesitas ayuda o porque conoces a alguien que la necesita. El siguiente paso tiene que ser: coge el teléfono y llama. Que se deje de tonterías y llame.

Y que venga acompañado.

 

¿Necesitas ayuda? Puedes contactar directamente con nuestro centro de desintoxicación en el +34 913 16 13 77 o escribirnos a intermedia@tavad.com. Serás atendido personalmente por una de nuestras asesoras-psicólogas.

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